Movimiento homosexual solidariza con juez chileno que investiga red de pedofilia

Tras conocerse las declaraciones de un ex dueño de un “sauna gay”, quien reveló a la prensa chilena que el juez Daniel Calvo frecuentaba su local, el movimiento homosexual expresó su absoluto repudio a la visibilidad pública de la vida privada del magistrado y a las asociaciones directas e indirectas entre pedofilia y minorías sexuales.

“La noticia de ayer es una de las más deplorables e inmorales conocidas por el movimiento gay chileno, en especial porque el origen del hecho tiene como denunciante a una persona gay”, señaló el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh).

El organismo consideró a la denuncia de Sebastián Rodríguez, dueño del sauna que fue cerrado en mayo anterior por cuentas impagas, como “una las más inmorales e irresponsables que han provenido de una persona homosexual respecto a la capacidad profesional de uno de sus “pares”. Ello porque no existe en ninguna de sus opiniones una argumentación clara que demuestre la inhabilidad del juez” en las investigaciones de la red de pedofilia comandada por el empresario Claudio Spiniak.

En una entrevista divulgada ayer por Chilevisión, Rodríguez precisó que el juez Calvo visitaba “como mínimo una vez por semana” su local, hecho que a su parecer deslegitima su labor como ministro en visita de la red Spiniak.

Chilevisión, en tanto, dijo que divulgó la entrevista porque dado el carácter altamente delicado de las investigaciones en torno a la pedofilia, la vida privada del juez lo podría volver vulnerable frente a eventuales chantajes o extorsiones que afectarían el curso de los estudios judiciales.

Las versiones de Rodríguez, que además han dejado abierta la posibilidad de posibles conductas pedofilas del juez, dieron paso a nuevos lenguajes discriminatorios por una parte de la prensa, “los cuales desde hace tiempo no leíamos”, agregó el secretario del Movilh, Juan Hernández. El activista se refirió específicamente a enfoques otorgados por el diario La Segunda el cual señaló que el sauna de Rodríguez atendía a “personas normales y homosexuales”.

Desde que se destapó el escándalo de la red Spiniak, las asociaciones entre pedofilia y homosexualidad han provenido desde diversos frentes. El primero en efectuar similitudes fue el sociólogo Pablo Huneeus para quien la “sacralización de los gays” haría “intocables a los pedofilos”. “Lo llamamos a perservar en sus estudios y preparación académica para que algún día pueda ofrecer al país una opinión de calidad”, fue la respuesta del Movilh en una carta abierta que dirigió al profesional.