En inédito acuerdo firmado con el INDH, Coordinadora Nacional de Inmigrantes en Chile y el Movilh. Se trata así del primer convenio alcanzando en América entre un movimiento LGBTI y el fútbol profesional.
El documento, denominado “Acuerdo de Voluntades por un Fútbol Inclusivo y sin Discriminación en Chile”, fue firmado por el secretario General de la ANFP, Sebastián Moreno; por el director del INDH, Branislav Marelic; por el presidente de la Coordinadora Nacional de Inmigrantes, Rodolfo Noriega y por el director del Área de Derechos Humanos del Movilh, Rolando Jiménez.
En el texto las partes se comprometieron a “prestarse la más amplia colaboración y asistencia para el desarrollo de acciones para la defensa, formación, promoción y difusión de los derechos humanos, destinadas a la convivencia pacífica, inclusiva y no discriminatoria en el desarrollo de las actividades del fútbol chileno,”.
En el acuerdo se establece además que “el fútbol, como lenguaje universal puede ser un poderoso vehículo para fomentar la solidaridad y la paz social, uniendo a los pueblos más allá de las fronteras” y que al considerar “la legislación nacional contra la discriminación arbitraria, los principios que la inspiran, y las recomendaciones contenidas en la Guía de Buenas Prácticas en materia de diversidad y lucha contra la discriminación de la FIFA” es imperioso condenar “toda conducta violenta y discriminatoria en los Estadios y centros deportivos del país”.
Se explicita, a la par, “el compromiso de fomentar y propiciar el respeto a la universalidad de los derechos humanos y las libertades fundamentales de todos y todas, sin hacer distinción alguna por motivos de raza, etnia, color, nacionalidad, situación socioeconómica, idioma, ideología u opinión política, religión o creencia, sexo, orientación sexual, la identidad de género, estado civil, edad, filiación, apariencia personal y la enfermedad o discapacidad”.
De esa manera, y por primera vez en su historia, la ANFP hizo referencia a la orientación sexual y la identidad de género, tras una serie de reuniones y diálogos con el Movilh que se extendieron por 9 meses y que dieron origen a la primera alianza de América entre el fútbol profesional y un movimiento de la diversidad sexual.
Durante el acto de firma, Moreno explicó que este “este acuerdo de trabajo buscará generar instancias participativas en el que cada asociación contribuya para realizar acciones concretas para combatir acciones y actitudes que dañen la integridad del ser humano. En la cancha y en las tribunas, todos somos iguales”.
Mientras para Noriega, el acuerdo es “una oportunidad increíble, un paso firme en el proceso de integración”, Marelic resaltó que se trata de “un primer paso para iniciativas en conjunto para que todas las personas que participan en este evento, sepan que la discriminación no va en un estado democrático. Realizaremos todas las instancias de promoción necesarias para que esto se comprenda”.
Por último, Jiménez puntualizó que “el fútbol es pasión de multitudes, y al mismo tiempo un lugar donde el machismo, la homofobia y otras formas de discriminación se siguen expresando con mucha fuerza. Con este acuerdo, damos un paso hacia la inclusión y la igualdad plena en el fútbol, que esperamos a anime a los deportistas a asumir sin miedos su orientación sexual y a los hinchas a respetar la diversidad en los estadios. Hoy celebramos la primera señal oficial contra la homofobia dado por el fútbol chileno”.
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