Movilh gestiona en el Senado últimos votos para Proyecto de Ley contra la Discriminación

La iniciativa legal es de especial importancia para las minorías y los grupos discriminados, pues previene y sanciona las exclusiones arbitrarias. En otro ángulo, el Movilh definió nuevas estrategias en torno a las investigaciones del Caso Divine.

  En el marco de las decenas de acciones sociales, políticas y culturales que el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) lidera desde 1998 para dotar a Chile de una ley contra la discriminación, representantes de esa organización visitaron ayer el Congreso Nacional para asegurar una votación exitosa de la norma.

    En específico, los activistas del Movilh dialogaron con representantes de Renovación Nacional (RN), de manera que los senadores de este partido de derecha se cuadren con la iniciativa, a la cual sólo le falta una votación en el Congreso.

    “Estamos satisfechos con las gestiones y esperamos en los próximos días tener noticias claras respecto a los votos de RN, los cuales son muy importantes para hacer realidad el sueño que venimos persiguiendo hace casi una década”, sostuvo la activista del Movilh, Sofía Velásquez.

     “Existen altas posibilidades de tener un buen resultado, pues RN ha jugado un rol muy constructivo en torno a esta ley y además, en ocasiones anteriores, ha apoyado proyectos diseñados por el Movilh”,  agregó la activista al recordar el Proyecto de Acuerdo Contra los Delitos por Homofobia y Transfobia que fue aprobado en la Cámara de Diputados el 3 de mayo del 2005 por 41 votos a favor y siete en contra.

    Las últimas gestiones del Movilh a favor de la norma, se encuadran en estrategias de alianzas establecidas con otras organizaciones sociales, como son Genera Ideas y Acciones Colectivas, la Agrupación de Inmigrantes por la Integración Latinoamericana (Apila) y el Servicio Evangélico para el Desarrollo (Sepade), entre otras instituciones que vienen jugando un activo rol por la ley.

    El Proyecto que Establece Medidas Contra la Discriminación fue ingresado por el gobierno a tramitación parlamentaria el 2005, recogiendo en cada uno de sus artículos los aportes de diversas organizaciones sociales, como el Movilh.

    Concebido como una alternativa a una reforma constitucional al artículo 19 que parlamentarios y el Movilh habían propuesto antes del 2005, el Proyecto contra la Discriminación incluye como categorías protegidas a la “orientación sexual” y al “género” , aspectos que durante toda la tramitación grupos conservadores han intentado excluir.

    “Sin embargo, a través de acciones inmediatas y propuestas realistas, finalmente conseguimos que ambas categorías estén presentes hasta el final de la tramitación. Sólo falta una votación para saber si finalmente cumplimos nuestro con objetivo”, puntualizó Velásquez.

DIVINE
En el contexto se su visita a Valparaíso, el Movilh definió además nueva estrategias en torno al caso de la discoteca gay Divine, cuyo incendio cobró la vida de 16 personas el 4 de septiembre de 1993.

    En ese sentido el Movilh se reunió con la abogada querellante, María Angélica Castro Esparza, quien desde ayer reemplazó en sus funciones a la jurista María Elena Quintana.

    “Entregamos formalmente el patrocinio de nuestra representación a la abogada Castro en el Segundo Juzgado del Crimen de Valparaíso, al tiempo que definimos los próximos trámites que realizaremos en torno el caso”, explicó el presidente del Movilh, Rolando Jiménez.

    Agregó que el cambio de jurista se produjo luego que un nuevo trabajo de la abogada Quintana le impidiera, por razones administrativas, seguir llevando el caso. “Lo bueno es que Quintana y Castro siempre han trabajado en conjunto el Caso Divine, por lo cual se asegura una muy buena representación, como ha ocurrido hasta ahora”.

    El caso de la discoteca Divine fue cerrado en 1994 y tras nueve años de investigaciones el Movilh consiguió su reapertura en el 2003. Desde esa fecha, las diligencias encabezadas por el Movilh han permitido conocer los nombres de las víctimas lesionadas y fatales, así como tomar la declaración de los principales sospechosos de causar el siniestro e identificar a los responsables de los brutales atropellos a los derechos humanos que padecieron víctima y testigos durante las investigaciones del 1993 y 1994.

      “En este caso, ya está comprobado que hubo negligencia para investigar a raíz de la homofobia imperante en esa época, la cual impidió agotar todas las diligencias. Tras la reapertura del caso, esta realidad dio un vuelco significativamente positivo, que esperamos llegue a su fin con justicia para las víctimas”, puntualizó Jiménez.


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