El Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) expresó hoy su “más completo repudio” a las recientes declaraciones homofóbicas del presidente de Renovación Nacional, Carlos Larraín, al tiempo que demandó
al candidato presidencial de la derechista Coalición por el Cambio, Sebastián Piñera, precisar de manera concreta en su programa la forma como contribuirá a la igualdad de derechos para lesbianas, gays, bisexuales y transexuales (LGBT).
La crítica contra el concejal Larraín tuvo lugar luego de que éste calificara a la eventual inclusión de una pareja homosexual en la franja de televisión de Piñera como “maniobras distractivas (que) sólo oscurecen la película a la hora de ir a votar».
Ello por cuanto, añadió a Emol.com, “el énfasis de la campaña de Sebastián Piñera tiene que ser el énfasis de una familia normal entre un hombre y una mujer”
Junto con asociar a la visilización de las parejas homosexuales a una “mazamorra disolvente que promueve la izquierda como fórmula de organización social» y negar la exclusión padecida por este sector, sostuvo que “la única institución que efectivamente está discriminada en Chile es la familia normal, que trata de criar hijos, y sacarlos adelante trabajando y ahorrando”.
Para el Movilh “sostener que hay sólo tipo de familia “normal” o que la visibilidad homosexual “oscurece” el proceso electoral demuestra lo peligroso que puede ser para los chilenos y chilenas que personajes como éste puedan llegar a tener cercanía o poder en un eventual gobierno, pues harían imponer sus prejuiciosas visiones sobre la realidad a todas las personas”
“Eso, en síntesis, demuestra la incapacidad e inhabilidad ética y moral de un sector político para gobernar, pues aspirar a ello requiere de la comprensión y atención de todas las realidades, y no sólo de aquellas que coinciden con las creencias, en el caso de Larraín de tipo excluyente, de quienes aspiran a dirigir un país”.
En paralelo, el movimiento de la diversidad sexual envío una carta a Piñera, donde calificó de “ficticia, irreal y tongo” la apertura discursiva manifestada en torno a los derechos de las minorías sexuales, pues nada ha incluido en su programa presidencial.
Además, explicó el Movilh, en las elecciones presidenciales pasadas Piñera dialogó con las minorías sexuales, escuchó sus propuestas y se comprometió públicamente con una ley de unión civil, nada de lo cual ha ocurrido en su actual campaña.
“Su apertura al diálogo experimentó un retroceso, pues se negó hasta al último momento a reunirse con el movimiento de la diversidad sexual, lo que explicita que su compromiso en torno a los debates favorables a la igualdad es muy inferior al pasado. O quizás, está más “secuestrado” que en el pasado, y eso de nada nos sirve”, señaló el Movilh,
“Lo llamamos a dejar los efectismos y a señalar en su programa presidencial qué efectivamente hará por nuestros derechos y como lo hará, de manera de no confundir perversamente al sector que representamos”, puntualizó la organización.
En el mismo plano el Movilh repudió al diputado UDI, Antonio Kast, y al presidente de la UDI, pues han “manifestado una permanente y persistente homofobia en este período electoral”.
CARTA DEL MOVILH A PIÑERA
A Continuación se reproduce la carta abierta redactada por el Movilh para Piñera:
«El Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) expresa a usted nuestro profundo malestar y repudio por el tipo de tratamiento que ha dado a la visibilidad de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales (LGBT) durante su actual campaña presidencial, aspecto que ha significado un fuerte retroceso en las señales de apertura manifestadas en las pasadas elecciones.
En concreto, si sus señales de apertura en las elecciones pasadas fueron reales, durante las presentes son ficticias e irreales, pues se limitan a una visibilidad mediática y efectista que nada compromete, arrojando de paso supuestas diferencias entre usted y la UDI que, a la luz de variados hechos, sólo podemos interpretarlas como un tongo, como una intervención consensuada con ese partido que se burla de nuestra realidad.
En efecto, en las anteriores elecciones presidenciales usted se reunió con el movimiento LGBT, en específico con el Movilh, y se abrió al diálogo para conocer las necesidades y propuestas de nuestro sector, señal concreta e inédita de un candidato presidencial de la derecha.
Hoy, en cambio, su apertura al diálogo experimentó un retroceso, pues se negó hasta al último momento a reunirse con el movimiento de la diversidad sexual, lo que explicita que su compromiso en torno a los debates favorables a la igualdad es muy inferior al pasado. O quizás, está más “secuestrado” que en el pasado, y eso de nada nos sirve.
También en las pasadas elecciones usted en la reunión con nuestra organización se comprometió públicamente con el apoyo a un proyecto de unión civil que le presentamos. Analizó uno a uno los artículos y estuvo de acuerdo con todos, lo cual nos sorprendió gratamente.
En la actualidad, sin embargo, usted ya no se pronuncia a favor de las uniones civiles, sino que de programas especiales para los convivientes, un nuevo retroceso que busca restar legitimidad jurídica y social a este tipo de vínculos.
Y sospechamos que su actual apertura, además de irreal y ficticia, es un tongo, pues inicialmente ha respaldado un documento de trabajo denominado Acuerdo de Vida en Común (AVC), redactado por los senadores Andrés Chadwick y Andrés Allamand, pero al mismo tiempo ello no es parte de su programa presidencial, ni tampoco es una unión civil, pero perversamente se ha dejado en la ambigüedad esta importante diferencia.
Además, según ha trascendido, su franja presidencial de televisión incluirá a una pareja gay, lo que ha valido una nueva supuesta pugna con el diputado UDI, José Antonio Kast, y el presidente de ese partido, Juan Antonio Coloma, ambos cuya conducta homofóbica ha sido constante y persistente.
A la par, su comando ha aclarado que la inclusión de parejas gays en su franja no derivará en compromiso alguno, como si lo que necesitará nuestro sector fuera ser un mero modelo de su campaña, sin efecto concreto, sin consecuencias que deriven en una mejor calidad de vida.
Esto es, por donde se mire, un aprovechamiento electoral y político de nuestros derechos, una burla que se agudiza al considerar que la propia productora que elabora su campaña se contactó semanas atrás con Movilh buscando homosexuales para uno de sus spots, situación que devela la fragilidad y el absurdo de su acercamiento real a las minorías sexuales.
E insistimos con lo de tongo, por que dado todo lo expuesto no creemos que la pugna mediática entre usted y algunos representantes de la UDI sobre su “apertura ficticia” sea real, sino que sólo una estrategia electoral. Las pruebas: ha sido Chadwick quien incidió supuestamente en la redacción del AVC y ahora el UDI Iván Moreira pide se le deje con libertad de acción para incluir a una pareja homosexual en su franja.
Pues bien, Chadwick y Moreira; junto a María Angélica Cristi y Kast, son precisamente los personajes que más se han opuesto a dar la más mínima señal de igualdad a los derechos de las minorías sexuales en el Congreso Nacional. Más aún, son estos políticos los cuales más veces han figurado en el Ranking Anual de la Homofobia elaborado por nuestra organización, pero ahora resulta que son “aliados en su apertura”. Lo poco y nada creíble de esta situación es, entonces, más que obvia.
Se ha dicho que quiere demostrar con su “apertura” una independencia en temas de derechos humanos, empero, lo curioso es que usted fue realmente aperturista en las pasadas elecciones y ello no le valió ninguna pugna, al menos pública, con la UDI. En cambio hoy, cuando es menos aperturista, pero más efectista, si tiene problemas y actúan como “apoyos” suyos los más homofóbicos. Tongo, por donde se mire.
En síntesis lo llamamos a dejar los efectismos y a señalar en su programa presidencial qué efectivamente hará por nuestros derechos y como lo hará, de manera de no confundir perversamente al sector que representamos.
Consejo Directivo Movilh».
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