Por primera vez en los 10 años de historia del incendio de la discoteca gay Divine el juez a cargo del caso, Jorge Gándara, decidió conocer la voz del movimiento homosexual chileno citándolo a declarar para estampar en el expediente sus denuncias y posturas en torno al siniestro que dejó una veintena de muertos.
El presidente del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), Rolando Jiménez, declaró esta mañana ante el actuario del Quinto Juzgado del Crimen de Valparaíso, Luis Palma, quien está a cargo de registrar diversos antecedentes que permitan dar luces sobre las verdaderas causas del incendio que el 4 de septiembre de 1993 destruyó la discoteca gay.
Jiménez fue citado en su calidad de responsable de las investigaciones que aportaron nuevos antecedentes para demostrar que el proceso había sido cerrado en marzo de 1994 sin agotar todas las diligencias. Las pruebas recolectadas por el Movilh permitieron tras nueve años de lucha la reapertura del caso el pasado 29 de septiembre.
“Estamos satisfechos porque juez decidiera conocer mediante una cita nuestras versión de los hechos, pues ello valida nuevamente las investigaciones que hemos cursado”, dijo Jiménez tras aclarar que en su declaración resumió lo ya dicho en el denominado “Informe Movilh-Divine, la justicia que merecen las víctimas”.
En dicho texto se demostró que las autoridades que estudiaron el caso en 1993 y 1994 no ubicaron a los principales sospechosos de causar el siniestro, entre esos Juan Espinoza, un ex taxista apodado como “el vietnamita”. El informe también reveló discriminación, torturas y malos tratos contra los testigos y sobrevivientes y la carencia de una “versión clara e indiscutible” que aclare los motivos del siniestro.
En su declaración Jiménez apuntó que desde el movimiento homosexual se desconocen las causas del siniestro, pero insistió en que si “el incendio se produjo por un atentado o un desperfecto eléctrico, en ambos casos deben delimitarse responsabilidades y sanciones”.
LOS NUEVOS ESCENARIOS
Tras la conversación con el actuario, el Movilh pidió al Quinto Juzgado del Crimen de Valparaíso formalmente y mediante un escrito ser parte del caso, para lo cual el organismo otorgó el patrocinio a la abogada María Elena Quintana, quien desde ahora representará a la organización homosexual. El juez deberá decidir en las próximas semanas se acoge tal petición.
Quintana también recibió hoy el patrocinio de Patricia Valverde, hermana de una de las víctimas fatales, quien está dispuesta a llegar hasta las últimas consecuencias para aclarar las causas del siniestro.
Los trámites de esta jornada permitirán a Quintana: 1) tener acceso al sumario, 2) Sugerir diligencias al juez, 3) presentar querellas contra quienes resulten responsables del proceso, 4) demandar que se conozca el número de exacto de personas fallecidas, lo aún no se sabe.
En caso de que el juez identifique responsables y determine sanciones al final de sus investigaciones Valverde y otros familiares podrán avanzar además en la petición de indemnizaciones, pero ello es algo que no es prioritario en la actualidad.
Además de citar a Jiménez, el juez ya tomó la declaración de Juan Espinoza (el vietnamita), sindicado por los ex propietarios de la Divine de haber provocado el incendio.
El “vietnamita” fue un elemento clave para la reapertura del caso, pues este año el Movilh dio con su identidad y paradero en menos de tres horas, trámite que las autoridades jamás hicieron. Con ello se demostró que el juez no había agotado todas diligencias en el proceso y, en consecuencia, debió reabrirlo.
El Movilh agradeció por último la buena disposición de Quintana para tomar el caso, pues “sólo nos pidió un aporte monetario para efectuar diligencias básicas. En la actualidad estamos intentando reunir el dinero para costear una pequeña cuota mensual. Valoramos también el trabajo voluntario que desde el pasado septiembre realizan junto a nosotros las procuradoras Pamela Morales, María Angélica Castro, Jovanina Vásquez, quienes ha sido una ayuda clave para los pasos que estamos dando”.