Postulantes al municipio de Santiago firmaron con Movilh compromiso contra la discriminación
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Se comprometieron a apoyar una Ordenanza Municipal contra la Discriminación que beneficie a todos los sectores sociales afectados por algún tipo de exclusión. Movilh lamentó además que senadores de derecha estén presentando indicaciones homofóbicas al proyecto de ley contra la discriminación radicado en el Senado.
Un contundente apoyo para la implementación de políticas municipales que enfrenten de manera específica la discriminación obtuvo hoy el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) al conseguir el respaldo escrito de candidatos a alcaldes y concejales por la comuna de Santiago.
Los aspirantes Ricardo Israel (PRI), Jaime Ravinet (Concertación) y Pablo Zalaquett firmaron en concreto un compromiso para dotar a la comuna de Santiago de una Ordenanza Municipal contra la Discriminación, en caso de que algunos de ellos resulte electo.
Lo mismo hicieron los aspirantes a concejal Ismael Calderón (PS), Regina Díaz (PPD),Alfredo Morgado (PPD) y Ernesto Medina (PRI).
De esa forma, los candidatos apoyaron la idea de enfrentar y prevenir desde los municipios toda distinción o exclusión basada en “motivos de raza o etnia, nacionalidad, situación socioeconómica, lugar de residencia, idioma, ideología u opinión política, sindicación o participación en asociaciones gremiales, sexo, género, orientación sexual, estado civil, edad, filiación, apariencia personal, enfermedad o discapacidad”.
Junto a ello, el apoyo a la Ordenanza implica que el municipio de Santiago brindará asesorías legales gratuitas para personas de escasos recursos económicos que han visto vulnerados sus derechos en razón de una condición social o individual.
“Esta es una iniciativa inédita donde el mundo de la sociedad civil organizada pone sobre la mesa de los candidatos municipales propuestas concretas, sin limitar su ejercicio democrático a la mera emisión de un voto en las urnas. Estamos muy satisfechos con el respaldo obtenido por los aspirantes de Santiago, pues eso demuestra que Chile está cambiando”, sostuvo el presidente del Movilh, Rolando Jiménez.
La campaña por la Ordenanza Municipal contra la Discriminación inició en agosto pasado a nivel nacional obteniendo apoyos de candidatos de todos los partidos y tendencias ideológicas de ocho regiones del país.
ORDENANZA Y LEY CONTRA LA DISCRIMINACION
La Ordenanza se basa en el Proyecto de Ley contra la Discriminación, iniciativa radicada en el Congreso Nacional y por la cual el Movilh viene luchando desde 1998.
En ese sentido, el Movimiento de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transexuales denunció y lamentó hoy que tres senadores de derecha “hayan presentado en la última semana indicaciones homofóbicas” para excluir a las minorías sexuales de la norma y para impedir el avance del matrimonio entre personas del mismo sexo.
“Aquí hay una campaña del terror de una parte de la derecha parlamentaria que intenta confundir a la opinión pública con una relación inexistente entre la ley de matrimonio y la ley antidiscriminatoria, iniciativas completamente distintas. Es reprochable que mientras candidatos municipales de todos los partidos apoyen esta idea, en el Congreso existan voces discordantes de algunos parlamentarios de las mismas colectividades”, apuntó el Movilh.
La indicación para sacar a las minorías sexuales del proyecto de ley contra la discriminación fue presentada por Jorge Arancibia (UDI) Andrés Chadwick (UDI), Hernán Larraín (UDI) y Adolfo Zaldívar (Inp).
Arancibia y Zaldívar “hicieron además indicaciones para impedir el matrimonio entre personas del mismo sexo, situación que refleja una brutal obsesión homofóbica que insiste en impedir derechos que ya por ley nos son injustamente negados, situación que demuestra una intención perversa por confundir a la opinión pública respecto a los verdaderos alcances de la ley antidiscriminatoria”.
El Movilh repudió, por último, “el grave doble estándar del senador Chadwick, pues en la última conversación que sostuvimos con él, nos aclaró que ya no seguiría oponiéndose a incluir a las minorías sexuales en la norma contra la discriminación. Su palabra y compromiso, según lo demuestran sus propias acciones, de nada sirven. No son confiables”.
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