Con coloridas e ingeniosas pancartas diversas organizaciones sociales realizaron hoy una potente manifestación contra el fallo de la Cuarta Sala de la Corte Suprema que quitó el pasado lunes la tuición de sus tres hijas a la jueza Karen Atala.
La actividad contó con la presencia de la jueza Karen Atala, quien la observó desde lejos, y su pareja, la profesora Emma de Ramón.
En la ocasión De Ramón indicó que «a mi alrededor hay un montón de personas que son homosexuales y que hacen lo mismo que yo todos los días, luchar por hacer mejor este país»
Agregó que «los homosexuales participamos de este país, por eso no permitimos que se nos diga que no servimos para criar a tres niñitas»
«Nosotras no estamos pidiendo casarnos ni nada de eso, sino que nos dejen vivir nuestro amor y compartir con las niñas. Es la madre la que exige eso, la mujer que las amamantó que se trasnochó cuando ellas estaban enfermas mientras el padre estaba absolutamente ausente”, puntualizó.
El acto de apoyo a una causa referente a los derechos humanos de las minorías sexuales, marcó una nuevo precedente, pues fue ideado y organizado por sectores ajenos a grupos homosexuales.
“El fallo representa una violación contra los derechos humanos y todas las mujeres, no sólo de las minorías sexuales por eso decimos no a este atropello con esta protesta”, señalaron integrantes de la Corporación La Morada, la cual junto a los grupos Católicas por el Derecho a Decidir, el Foro de Derechos Sexuales y Reproductivos, la Red Chilena contra la Violencia Doméstica y Sexual, el Fondo Alquimia, el Movimiento Pro Emancipación de la Mujer Chilena, Flacso, Vivo Positivo y Sidaccion lograron reunir a unas 200 personas frente al Palacio de Tribunales.
Con pancartas y consignas del tipo “Corten a la suprema vergüenza nacional”, “Libertad y Diversidad”, a la manifestación se sumaron diversas organizaciones de minorías sexuales, como el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), el Movimiento Unificado de Minorías Sexuales y Trabajos y Estudios Lésbicos (TEL).
TEL dio particular dinamismo a la actividad, pues en medio de varias banderas del arcoiris y con megáfono en mano, sus integrantes alegaron que “soy lesbiana y que huea”, “Karen Atala no es mala” y “mi mamá es homosexual”.
En un comunicado, los organizadores de la protesta expresaron que “estamos indignados e indignadas por la resolución de la Corte Suprema. (…) Nuevamente la Suprema discrimina y niega la libertad a las mujeres. Está claro que los magistrados siguen siendo un tapón para el desarrollo”.
El activista del Movilh, Juan Hernández, valoró profundamente que “organizaciones distintas al movimiento homosexual crearan un espacio de pluralismo frente a la Corte Suprema y por un caso que involucra a una madre lesbiana. Esperamos que situaciones de este tipo sigan ocurriendo en el país. Sólo unidos es posible alcanzar triunfos”.
En el acto también estuvieron presentes la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y la Fundación Ideas, cuyo director (Francisco Estévez) actúa como vocero de la jueza Atala y ha criticado con crudeza el fallo calificándolo de “primitivismo judicial”.