Tras denuncia efectuada por el Movih, el Mineduc solicitó un informe al Colegio Cristiano Gandarillas de Maipú, el cual considera a la homosexualidad como una “abominación” que debe ser sancionada con la expulsión.
La Superintendencia de Educación acogió la denuncia del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) respecto a reglamentos y prácticas homofóbicas en el Colegio Cristiano Gandarillas de Maipú, iniciando una investigación sobre la materia.
En relación a las “supuestas disposiciones discriminatorias” del establecimiento, “se solicitará informe al Colegio sobre los hechos denunciados y copia de referido reglamento”, señaló la Superintendencia al Movilh.
En tanto, en el transcurso de las últimas horas, fue el propio Ministerio de Educación el que señaló en su cuenta oficial de twitter que ser efectivo lo denunciado se estaría en presencia de “ilegalidad”.
El Movilh valoró la rápida respuesta del Superintendente de Educación, Alexis Ramírez (en la fotografía) y dijo esperar que “las sanciones contra el colegio sean ejemplares, pues el reglamento es explícito en sus discursos de odio contra estudiantes o docentes en razón de su orientación sexual”.
En su reglamento el Colegio Gandarillas castiga “la conducta homosexual con la marginación total y la reubicación en otro recinto educacional”.
Lo anterior, en tanto considera a la homosexualidad como “un pecado y una abominación a Dios” que es “consecuencia de la caída en pecado del hombre. No es el orden natural de la creación, sino una deformación del orden creacional”
“Nuestro Establecimiento, no acepta al individuo que se declara homosexual ya sea por palabra o hecho”, dice el Reglamento, calificado por el Movilh como la “una de las más graves y grotescas expresiones de homofobia de un colegio chileno en la última década”.
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